Tellado compara a Sánchez y su mujer con los Kirchner: “Todos sabemos cómo acabó aquello”

Miguel Tellado invitado al encuentro informativo del Fórum Europa

Tellado compara a Sánchez y su mujer con los Kirchner: “Todos sabemos cómo acabó aquello”

Mecenas    

MADRID, 6 de mayo. El portavoz del Partido Popular en el Congreso, Miguel Tellado, aseguró en el Fórum Europa que Pedro Sánchez y su esposa, Begoña Gómez, se han convertido en “una especie de Kirchner” ante los acontecimientos de las últimas semanas, y advirtió de que el presidente del Gobierno es “una verdadera amenaza para la democracia”.

“Y todos sabemos cómo acabó aquello”, apostilló en este encuentro informativo organizado por Nueva Economía Fórum en Madrid en referencia al kirchnerismo, en el que fue presentado por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. 

Tellado avisó de este modo de que España vive una “situación insólita” porque su democracia “está siendo atacada”. “Y el ataque viene precisamente del Palacio de la Moncloa, del Gobierno de España y de su presidente, quien debería velar por mantener los cimientos de nuestra democracia”. Y acusó a Sánchez de querer “perpetuarse en el poder” y buscar “impunidad” judicial. 

Por ello, defendió que la labor del PP es “no aceptar como normal lo que no es normal”, “controlar al Gobierno” en su labor de oposición y “construir una alternativa de futuro para España”. 

“Los Sánchez Gómez se han convertido en una especie de Kirchner. Son los Kirchner de España y todos sabemos cómo acabó aquello”, remarcó Tellado. Cabe recordar que un Juzgado de Madrid abrió diligencias a Begoña Gómez por un presunto delito de tráfico de influencias en sus actividades laborales. 

Antes, preguntado por si citarán a la mujer de Sánchez en la comisión de investigación del Senado sobre el ‘caso Koldo’ por esta investigación, el portavoz del PP recordó que, por el momento, su hoja de ruta pasa por que el presidente del Gobierno comparezca en el Congreso para dar explicaciones. En caso de no hacerlo, señaló que estarán obligación de llamarle a dicha comisión, aunque antes comparecería ante el Pleno de la Cámara Alta. 

Preguntado entonces por lo que pasará con la mujer de Sánchez, Tellado admitió que quien debe dar explicaciones es el propio presidente del Gobierno, aunque sí advirtió de que, “si no lo hace”, el PP no renuncia a llamar “a todo aquel que tenga información”, apuntando así a Gómez. 

En esta coyuntura, al inicio de su exposición inicial, Tellado avisó de que el “ansia populista” de Pedro Sánchez y su “huida hacia adelante” ante las informaciones sobre su esposa “le convierten en una verdadera amenaza para la democracia”. “Vivimos el inicio de un ataque sin precedentes contra el resto de poderes del Estado y la mitad de España, esos que estamos al otro lado del muro”, prosiguió. 

Denunció de este modo “la deriva” en la que Sánchez ha incurrido tras publicar su carta a la ciudadanía hace casi dos semanas, en la que comunicó que se tomaría cinco días de reflexión para sopesar su dimisión, un escenario que finalmente descartó. 

Tellado advirtió de que, en la actual coyuntura, existe “menos control que nunca” ante el Gobierno “más descontrolado”. Alertó de que Sánchez ha desatado en estos últimos días un “ataque” contra el Poder Judicial y la prensa libre, “al mismo tiempo que ha anulado el Poder Legislativo”, puesto que el Congreso está “cerrado a cal y canto” por el ciclo electoral. 

“Cualquiera podría, en este contexto, llamar al presidente democrático, al presidente del Gobierno, un autócrata”, indicó antes de subrayar que el hecho de que “un Gobierno sea legítimo no significa que sea legítimo todo lo que haga”. 

Asimismo, acusó al presidente del Gobierno de cubrirse de “un fango de hipocresía” por usar el “sentimentalismo” como “señuelo” al mismo tiempo que pide información tributaria de la familia del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, y de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, además de esparcir “bulos” y referirse a casos archivados –en alusión al del hermano de Ayuso–. 

Por último, subrayó que, si Ayuso hubiera tenido que suspender su agenda por los insultos recibidos, no se habría marchado cinco días, sino “cinco meses”.